País: Francia
Fecha de emisión: 27 de abril de 2002.
Documento filatélico emitido por el correo francés, en referencia al sello reseñado en las entradas anteriores.
Motivo de la emisión: en el año de la disputa de la edición Corea-Japon de la Copa FIFA, se hizo esta emisión conjunta de los países ganadores de la Copa (hasta 2002): Uruguay (1930 y 1950), Italia, Brasil, Alemania, Argentina, Francia e Inglaterra (el correo del Reino Unido no participó en la emisión conjunta, aunque la bandera inglesa aparece en el sello.
En el sello, ya reseñado en la entrada anterior, aparece la bandera de Uruguay, indicando que es uno de los países que ha ganado la copa. En el texto del documento se menciona dos veces a Uruguay.
Traducción:
El 31 de mayo de 2002, ante 64.000 espectadores del estadio de Seúl -y millones de telespectadores de todos los continentes- será dado el puntapié inicial de la fase final de la XVII Copa del Mundo de fútbol. Por primera vez en su historia, la competencia deportiva más mediatizada del mundo tendrá lugar en Asia. Coorganizada por Japón y Corea del Sur, la Copa del Mundo 2002 se desarrollará en veinte ciudades diferentes -diez de cada país- y verá enfrentarse 32 equipos a lo largo de 64 partidos. Habrá que esperar al 30 de junio, en el estadio japonés de Yokohama, para conocer el nombre del país que ganará el torneo, disputado la primera vez en 1930, en
Uruguay.
Entre esas dos fechas, cuántas proezas entraron en la leyenda. Seguramente cada uno guarda en su memoria la primera victoria obtenida por Francia, país organizador en la última edición: dos goles de Zinedine Zidane y uno de Emmanuel Petit sellaron, el 12 de julo de 1998, el indiscutible dominio de los "Bleus" frente a un equipo de Brasil cuatro veces campeón del mundo (1958, 1962, 1970, 1994), símbolo de un virtuosismo latinoamericano encarnado igualmente por Argentina (vencedora en 1978 y 1986) y el
Uruguay (1930 y 1950). Mucho antes que Francia, Italia y Alemania (con tres victorias cada una) así como Inglaterra, cuna del fútbol moderno y vencedora sobre su suelo en 1966, habían sabido hacer triunfar la potencia y el método del juego europeo.
La gloria de los países fue también la de los hombres. La leyenda retendrá especialmente al brasileño Pelé, único jugador en ganar tres copas del Mundo y a menudo considerado como el más grande futbolista de todos los tiempos. Ella tampoco olvidará al francés Just Fontaine, mejor goleador de la historia de la Copa, autor de 13 goles en 1958, en Suecia.
Pero la historia del deporte es un eterno recomenzar. Nadie duda que las próximas Copas del Mundo tendrán sus nuevos héroes, revelados tal vez por la primera edición del nuevo milenio.
